Salud capacita a personal operativo en vigilancia epidemiològica
- Se contó con la participación de personal de enfermería de centros de salud del municipio de La Paz
Como parte de las acciones emprendidas para fortalecer el trabajo de vigilancia y control epidemiológico, la Secretaría de Salud en Baja California Sur desarrolló un curso de actualización y atención al paludismo y cólera, dirigido a personal de enfermería de los centros de salud del municipio de La Paz, a fin de reforzar los conocimientos y mecanismos de acción ante una posible presencia de estos padecimientos.
Así lo indicó, Ana Ibeth Islas Canizales, jefa de Jurisdicción Sanitaria 3 La Paz, al comentar que estas actividades permiten al personal operativo conocer la situación actual de estos padecimientos en el país y su relación con los movimientos migratorios a nuestro estado, así como actualizar la información para el diagnóstico oportuno e inicio de tratamientos.
La funcionaria señaló que, a pesar de que no existe presencia de estos padecimientos en la entidad, es importante tener la capacidad de reconocer los síntomas en los pacientes que acuden a consulta, con la premisa de que las acciones terapéuticas tienen mayor efectividad cuando las enfermedades son identificadas en etapas tempranas.
En ese sentido, agregó que dentro de los objetivos del curso taller está desarrollar habilidades para mejorar la técnica de gota gruesa, que es la prueba de laboratorio para detectar en la sangre la presencia del parásito causante de paludismo. De igual manera, el procedimiento para la toma de heces, manejo y envío de las muestras que permitirá incrementar la calidad de los resultados.
Islas Canizalez enfatizó que, además del cólera, las enfermedades diarreicas agudas son muy comunes en temporada de calor y lluvia, de ahí la importancia en apoyarse del personal de enfermería para promover entre la población las prácticas higiénicas para la preparación de alimentos, como es es el lavado de manos antes de preparar o ingerir la comida y después de ir al baño; desinfectar con cloro todas las superficies y equipos usados en la elaboración de comestibles, el uso de agua hervida o purificada y la correcta conservación de productos perecederos.