Del Teletipo al Internet Por Jesús Leyva M.

Del Teletipo al Internet

Por Jesús Leyva M.

Director de MonitorBCS.com y BermejoRadio.mx

 

Hoy al celebrarse en México el Día Nacional del Periodista, me viene a la mente una reflexión, me tocó la gran fortuna de vivir el cambio de lo mecánico, a lo análogo, a lo digital, en cuestión de años me tocó cambiar de trabajar con una regleta, por un teclado. Desde esperar una noticia por teletipos o telex, a ver en segundos una información por internet; esperar días a que llegaran por correo tradicional unas fotos, a ver como en la actualidad unas fotos o video en cuestión de segundos del otro lado del mundo. Pasamos de las ondas Hetzianas y transmisores a una tarjeta digital “Encoder” para transmitir radio en línea; Pasamos de las transmisiones en vivo con una unidad terrena por microondas o satelital, a un celular con internet 5G en el momento.

 

Decir que antes era mejor como se hacía el periodismo, es sólo un sentimiento de recuerdo y nostalgia, ahora la tecnología a superado a la imaginación, la apertura de los medios de comunicación a llegado para comunicar en diversos campos que te obliga diariamente a explorar nuevas plataformas y nuevas tecnologías.

Tuve la fortuna de entrar trabajar en 1994 a la redacción del Periódico “El Forjador” con la dirección de dos grandes periodistas como son Federico Riestra Castro, y a un gran forjador de generación de periodista y fundador de los principales periódicos de la época como lo fue Don Carlos Morgan Martínez, donde recuerdo escuchar al fondo una máquina que tecleaba todo el día y que imprimía un papel que se conocía como teletipos; escribíamos a maquina de escribir y a veces en una computadora AT o XT que grabábamos en un disquet de 3 1/2 . ahí aprendí a diagramar con una regleta mediamos las pulgadas por columna para saber lo que cabía en cada hoja del periódico. Años después, llegó la computadora a la redacción conectada a una antena parabólica que llegaba información de Notimex con información que aprendimos juntos a utilizar el entonces director y gran maestro Carlos Rondero Savín y el jefe de redacción Vic Villavicencio, así como el jefe de información Salvador Salgado Gutiérrez y un servidor. 

Cuando cubríamos un evento teníamos que pasar a la tienda de revelado, en un rollo que nos cabían máximo 26 fotos, y no sabían cual era la foto buena, hasta que teníamos unas horas después el revelado impreso de nuestras fotos, muchas veces, en mi caso, con grandes decepciones, nunca ha sido mi fuerte la fotografía. Todavía recuerdo cuando vi en mis manos la primer cámara digital tenía entrada para disquete y su espacio era reducido para fotos no de muy buena calidad, pero lo último en tecnología que había, que me dio como herramienta de trabajo mi jefe Alfredo Polanco Holguín, me creía de primer mundo.

Me tocó reportear en el aeropuerto, de donde salían muchas fotos para mi columna social, pero ahí era un buen punto, para agarrar de primera mano las noticias que llegaban del centro del país, de los funcionarios federales, estatal o municipales que llegaban para anunciar algunas buenas noticias que venían para la entidad, hoy desde el mismo momento, de lograr acciones en el centro del país, los servidores públicos desde sus mismas redes sociales las anuncian, ya no se tienen que esperar a llegar al estado para anunciarlas.

 

La primera ocasión que entré a una cabina fue en la XEVSD en Ciudad Constitución acompañando a Federico Riestra allá por 1989, quien me explicó como funcionaba la radio y como los operadores tenían que hacer de manera mecánica todo el trabajo de controlar una consola con discos de vinilo y se ponían unas cintas magnéticas con los anuncios, se transmitía en Amplitud Modulada (Am) en la frecuencia 1440.

 

En la televisión recuerdo haber llegado por allá de 1997 al Instituto Estatal de Radio y Televisión bajo la directriz de Mario Zamora Robles, donde aprendí a escribir para radio y tele, en una máquina de escribir a 45 golpes con un espacio para un insert (Fragmento del entrevistado) y hacer un remate, para después grabarla a donde fui el dolor de cabeza de mi difunto amigo Jaime Murillo, aun creo que nadie ha roto mi record de más equivocaciones al grabar una nota, bueno echando a perder se aprende.

 

Hoy en día los medios de comunicación fueron degradados, muchas veces minimizados en defensas insanas por el fanatismo, de quienes no aceptan la crítica, hoy se llaman “Chairos”, pero antes se llamaron “Peñabots” y mucho antes se llamaron “amigos de Fox”, la clase política en ocasiones y desde muchas décadas atrás han tratado de desprestigiar la labor periodística para minimizar la información incomoda, pero siempre la misma sociedad es la que tiene la última palabra.

El periodismo me ha dado grandes oportunidades, como estar en grandes eventos como la final del futbol el 6 de diciembre del 1997 con el equipo de Tv Azteca en el Neu Camp de León, en aquella que había sido hasta hace meses el último campeonato del Cruz Azul, ver aquel penal de Carlos Hermosillo vs Ángel Comizzo, me queda en mi mente ese momento, sin ser particiaria de ese equipo. Haber entrevistado en el aeropuerto a mi ídolo de la Infancia. Roberto Gómez Bolaños “Chespirito”, haber trabajado en sus giras con Óscar Cadena, a Jaime Maussan, y con otros periodistas de clase mundial, haber cubierto muchas giras presidenciales, haber entrevistado a muchos personajes nacionales y locales que han escrito historia, ha sido para mi una gran oportunidad que se traduce en pasión.

 

El compromiso es siempre con la verdad, aún cuando la verdad es efímera. En un mundo globalizado y competitivo, es menester seguir estudiando y profesionalizándose para lograr lo más importante que es seguir sintiendo la misma adrenalina en cada nota que genera interés público.

 

Existe un gran riesgo, que es la pérdida de la Libertad de Expresión, consagrada en nuestra carta magna en el articulo sexto, ahí es donde he centrado mi gran lucha, por que se respete a la libertad de pensamiento, el derecho a manifestarse y expresarse, estemos de acuerdo o no en cualquier tema. He sufrido la censura desde que te corran de una redacción por que no le eres servil a un gobierno en turno, desde amenazas verbales que no han pasado de ahí, aunque me duele como muchos compañeros han perdido la vida y por ello, es hoy por hoy el oficio más peligroso para ejercer en mi país. Me han censurado y bloqueado cuentas de mis redes sociales y he vuelto a empezar más de media docena de veces, me han intentado hackear mi medio, pero esos embates los he sorteado y sin nunca hacer alarde de ello, prefiero mi paz y mi tranquilidad interna, la satisfacción de seguir informando, lo hago como siempre lo digo con pasión y con vocación, abriéndome camino en una profesión muy competitiva, pero haciendo lo que amo. Gracias por permitirnos entrar en tu vida a través de la información que generamos.